Cuando se habla de las telas batik, se está haciendo referencia a unas telas en particular cuyo origen es la región de Indonesia. Más en particular, un lugar llamado Isla de Java. Telas que se desarrollaron entre impresionantes paisajes llenos de color y de magia y que provienen de una técnica que data de miles de años atrás y que se conserva en la actualidad.
Conozcamos las telas batik
Las telas batik son todavía un misterio para las sociedades occidentales. Se considera que nadie sabe dónde y cómo fue que surgieron en realidad. De hecho, en China, se han encontrado trozos de tejido de esta índole ya en el siglo VI, pero no está claro de cuándo comenzó a utilizarse la técnica en su lugar de origen, Indonesia. Sí hay pruebas que indican que ya en el siglo XVII se exportaban y se importaban telas batik en esa región.
El batik se ha vuelto especialmente famoso a lo largo de las últimas décadas. Se ha convertido en un verdadero símbolo de la identidad de la región. tanto es así que, en el año 2009, la UNESCO la incluyó en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
La técnica del batik
La técnica con la que se logran las telas batik se basa, principalmente, en el uso de cera de abeja sobre tela de algodón. También puede ser lino, seda o manta. La cera se emplea especialmente con el objetivo de retener las áreas coloreadas de tela, teñirlas luego y volver a cubrir las zonas deseadas.
Es un procedimiento que consiste, siguiendo lo mencionado con anterioridad, en aplicar capas de cera sobre las secciones que no se quiere teñir. Estas técnicas se encuentran bien detalladas en documentos antiguos, donde se puede ver cómo se elaboraban estas telas anteriormente.
Usos de la batik
Como hemos dicho más arriba, es un tipo de tela que se ha popularizado considerablemente a lo largo de las últimas décadas. Por eso, se puede encontrar esta tela en cada vez más y más diversas aplicaciones. No obstante, las prendas en las que se suele realizar esta técnica con más frecuencia pueden ir desde pequeños turbantes hasta otras prendas que son especialmente reconocidas de la zona Oriental del mundo. Se emplean en chales o en blusas tradicionales. Una prenda muy popular en este sentido es el sarong. Se trata de una especie de falda que se usa sin distinción de género y que se considera una gran pieza de batik.