Lo primero que hay que decir es que no es cierto que exista un tejido que no pueda sufrir en absoluto el fuego. Dicho eso, sí es cierto que hay tejidos que pueden resistirlo mucho mejor que otros. Se trata de telas que son conocidas también como “retarda llamas” o telas contraincendio, puesto que tardan mucho más que cualquier otra en quemarse cuando están expuestas al fuego. A continuación, te contamos cuáles son.
La lana
De las fibras naturales, la lana es considerada como la más resistente a la exposición al fuego. Es difícil de encender cuando se expone y las llamas se extinguen al entrar en contacto con las fibras. A tener en cuenta, cuando el material de fibras naturales está constituido por un tejido bien apretado, este tiende a ser más resistente al fuego.
El poliéster, nylon y acrílico
Con excepción de la lana, el resto de los tejidos naturales tienden a ser más susceptibles al fuego que los sintéticos. En este sentido, las telas hechas en poliéster, nylon y sintético pueden considerarse como resistentes al fuego. Esto se debe, en particular a que son resistentes a la ignición a temperaturas más altas que las fibras naturales como la seda y el algodón. Los materiales sintéticos, además, se pueden tratar utilizando compuestos químicos resistentes a las llamas para aumentar la capacidad que estos tengan de soportar altas temperaturas. De todos modos, se debe tener en cuenta que estos tejidos pueden ser peligrosos cuando se queman, puesto que sus materiales se pueden derretir y generar quemaduras en la piel cuando están empleados en indumentaria.