Hoy en día, los barbijos o tapabocas forman parte de nuestra vida diaria. En todas partes del mundo, las personas los utilizan para reunirse con otras, para salir a hacer las compras y para recibir pedidos a domicilio. Por eso, es una pieza que no puede faltar en un contexto de pandemia como el actual. La capacidad del barbijo de reducir las posibilidades de contagio de coronavirus ha quedado demostrada desde hace tiempo y comprobada por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
¿Por qué apostar a barbijos caseros?
Actualmente, toda persona que concurra a un establecimiento o lugar público debe tener un barbijo puesto. No obstante, la utilización de barbijo no quiere decir que se pueda dejar de lado el distanciamiento social. Está comprobado que la unión de las dos cosas – barbijo y adecuado distanciamiento entre personas – y una correcta y frecuente higiene de manos reducen considerablemente las posibilidades de contagio.
Algo que se debe tener en cuenta es que la disponibilidad de barbijos quirúrgicos al acceso de los profesionales de la salud es algo limitado. Por eso, se recomienda que el público general que no trabaja en servicios médicos evite su compra y su utilización, a fin de aumentar la disponibilidad para estos sectores. En contraposición, se recomienda acudir a barbijos de tela, que pueden ser comprados o hechos a mano. A continuación, vamos a indicarte cómo hacer y cuáles son los pasos a seguir para que puedas crear tu propio barbijo o tapaboca de la mejor manera para protegerte y proteger a los demás.
¿Qué características debe cumplir un barbijo?
Hay ciertas cosas y características que no pueden faltar en un barbijo para protegerse y proteger a los demás del coronavirus. Estas son:
- Que se ajuste bien, pero manteniendo comodidad contra el puente nasal y el lateral del rostro
- Que cuente con por lo menos dos – aunque mejor tres – capas de tela
- Que quede bien asegurado con elásticos o lazos para sostenerse detrás de las orejas y no caerse
- Que permita fácilmente la respiración y no la interrumpa ni condicione
- Que sea lavable y fácil de secar sin que ello incida en su forma natural
- No es obligatorio pero es deseable utilizar telas antibacterianas.
Materiales para crear un barbijo
Los materiales que vas a necesitar para poder hacer tu propio barbijo no son muchos. Estos incluyen:
- Dos trozos de tela de algodón de 16×26 cortados en forma de triángulo (puedes usar diferentes tipos de telas, tales como el corderoy y la microfibra)
- Dos piezas elásticas, que pueden ser tiras de tela, cintas para el pelo, gomas, entre otras
- Tijera
- Aguja
- Hilo
Consejo: Evitá telas que producen alergias
Pasos a seguir para hacer tu propio barbijo
Una vez reunidos los materiales anteriormente mencionados, podemos proceder a la confección. Lo primero que vamos a hacer es recortar en una tela seleccionada dos triángulos, con 26 centímetros de largo y 16 centímetros de alto en cada lado. Se recomienda elegir una tela de algodón que tenga un entramado compacto, como puede ser el caso de una remera de algodón o de una sábana que ya no se utilice. Los dos triángulos van a ser apilados y se va a coser la máscara como si se tratase de una sola pieza.
Finalizada esta parte, vamos a doblar sobre los lados largos un centímetro, procediendo a coser un dobladillo. Posteriormente, se va a doblar la doble capa de tela sobre 1,5 centímetros a lo largo de los dos lados cortos del barbijo, cosiendo con dirección hacia abajo.
A continuación, se pasan unos 16 centímetros de elástico fino mediante el dobladillo más ancho a cada lado del barbijo. Esos elásticos son los que van a sostener el barbijo en las orejas. Se tira suavemente del elástico para que los nudos queden dentro del dobladillo, juntando luego los lados de la máscara en el elástico, ajustando al rostro de cada uno. Finalmente, sólo queda coser el elástico en el lugar en que va, para prevenir de que no se deslice y se caiga cuando esté puesto.
Cómo detalle adicional es probable que quieras endurecer la tela del barbijo para que sea más duradero y fácil de colocar.
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